El turismo LGBT, a veces también turismo homosexual o turismo gay, es una modalidad de turismo dirigida a personas de la comunidad LGBT (lesbianas, gais, bisexuales y transexuales) que se ha ido implementando en los últimos años en lugares de amplia aceptación social de la homosexualidad, como lo son principalmente Europa Occidental, Norteamérica y ciertos sitios en El Caribe, con una oferta creciente proveniente también de Sudamérica, en especial de Uruguay, Brasil, Argentina y Colombia.[1] Por lo general quienes toman estos destinos son abiertos en su orientación sexual e identidad de género, pero en su mayoría suelen ser más discretos al momento de viajar dependiendo el lugar, por razones de seguridad personal, en espacios abiertos existen muchos lugares que no aceptan la diversidad sexual y surgen problemas de discriminación sexual y violencia hacia la comunidad homosexual.
La industria del turismo gay se ha visto ampliada en países donde el aporte del turismo al producto interno bruto es importante, considerando el «dinero rosa» y adecuando su oferta turística para este sector, esto incluye agencias de viajes, líneas de cruceros, hoteles, centros de relajación, saunas, clubes nocturnos, bares gay, entre otros lugares y servicios calificados como gay friendly. Compañías de publicidad han dirigido campañas específicamente al público homosexual o incluso han implementado una línea especial para lograr el objetivo de atraer a los turistas.
El turismo gay no debe confundirse con el turismo sexual, debido a que el propósito no es necesariamente tener relaciones sexuales, sean éstas a cambio de dinero o no. No obstante, algunos destinos ofrecen servicios sexuales gay en lugares donde la prostitución se encuentra regulada.
Por otra parte, aparecen nuevas alternativas para parejas del mismo sexo que desean viajar juntas, con el incremento progresivo de países que legalizan el matrimonio igualitario. Como «sitios tolerantes», se convierten en un destino atractivo para extranjeros en cuyos países de origen no regulan al respecto, como también la elección de estos lugares para la celebración de la luna de miel.[2]